Cada vez son más las empresas que reconocen las ventajas de elegir software de código abierto. Según el último informe realizado por Red Hat, The State of Enterprise Open Source 2021 el open source lo emplean las empresas más innovadoras gracias a que permite suficiente flexibilidad para adaptarse a sus necesidades. Así es. Una de las características del código abierto es que puede agilizar los procesos de innovación.

Clara García Viñola, diseñadora de Penpot

Sí: el código abierto es seguro y tiene alta calidad

Además de la flexibilidad y esa capacidad de customización y actualización constante, esta tecnología ofrece a las empresas y usuarios particulares:

• Seguridad. Las empresas se preocupan por el grado en que la herramienta estará libre de riesgos. Pero el software cuyo código fuente está abierto asegura que más personas pueden inspeccionarlo y localizar y corregir posibles vulnerabilidades. Aquí entra un rol activo del usuario que debe recordar aplicar las últimas actualizaciones.
• Costos más bajos. La mayoría de los proyectos de código abierto a menudo están exentos de cargos.
• Soporte asegurado. Las comunidades de sistemas operativos son increíblemente activas on line, lo que significa que a menudo hay excelentes opciones de soporte técnico disponibles de forma gratuita como foros, soporte técnico on line y documentación.
• Alta calidad. Este punto es crucial en open source. Al haberse desarrollado por una comunidad transfronteriza de personas expertas en desarrollo que aglutina experiencia, talento y enfoques, la herramienta se mantiene en constante optimización y recibe mucha riqueza de aportaciones.

El uso es ya tan generalizado de manera directa o indirecta, que nos llegamos a preguntar desde el equipo de Kaleidos si se nos habría quedado pequeño el software libre.

Contribuciones que enriquecen

En efecto, el mejor argumento de open source para las empresas son las contribuciones de la comunidad para seguir mejorando una herramienta. Al elegir open source, da tranquilidad saber que existe una comunidad y, sobre todo, saber que si esa tecnología sigue evolucionando, su producto también va a seguir transformándose.

Quienes estamos en equipos de desarrollo sabemos que la existencia de contribuciones son esenciales porque a menudo te hacen propuestas que ni siquiera habrías imaginado. Provienen de personas de todo el mundo que mejoran un proyecto desde un espíritu colaborativo, y estas mejoras se comparten de nuevo con la comunidad para que cualquiera se pueda beneficiar de ellas. Así, el que la base de estas herramientas esté en las contribuciones externas enriquece las actualizaciones y la evolución de las mismas adaptándose a las necesidades que vayan surgiendo con su uso.

No existía y la creamos: Penpot, el diseño accesible

En Kaleidos todo lo que desarrollamos es open source. Generamos productos a partir de software libre, contribuimos a la comunidad, la comunidad a su vez hace aportaciones a nuestros productos y es un ciclo bien engrasado.

Intervención de Clara García Viñola durante el encuentro Maker Faire Galicia 2021

También tratamos de usar solo herramientas open source. Tenemos tan claro que queremos apoyar este tipo de tecnologías que hasta seguimos una tabla de criterios que nos ayuda a elegir nuestras herramientas de trabajo. En ella se incluyen cuestiones como:

• ¿El código de la herramienta tiene una licencia válida?
• ¿Estamos alineados con los valores de la compañía?
• ¿La aplicación hace mal uso de mis datos?
• ¿Aporta valor práctico en relación con mi trabajo? Premiamos las posibilidades que nos da la herramienta y cómo influye en nuestra productividad. Para Kaleidos es más importante la filosofía y espíritu del software libre que la productividad, y está dispuesto a asumir una pérdida de productividad por este motivo.

“No existía ninguna herramienta de diseño y prototipado de software libre ¡y creamos Penpot!”

Desde el equipo de diseño, llegamos a la conclusión de que había un circuito cerrado de herramientas privativas entre diseñadores, desarrolladores y clientes. No existía ninguna herramienta de diseño y prototipado de software libre, así que decidimos crearla ¡y nació Penpot!

El código de Penpot está en repositorios abiertos y todo el mundo puede ver sus tripas y colaborar con la herramienta. Y, al igual que nos pasó de manera interna, creemos que si tanto clientes como equipos de diseño y desarrollo se dan cuenta de los beneficios que tiene nuestra plataforma, van a ayudar en el mundo del diseño apoyando una herramienta accesible, abierta e inclusiva.

Una cuestión de concienciación y confianza

En la actualidad, desde Kaleidos nos dedicamos en exclusiva a desarrollar nuestros dos productos, ambos de código abierto: Taiga y Penpot. Pero cuando desarrollábamos productos para terceros, sentíamos el deber de hacer un trabajo de divulgación destacando los beneficios de contribuir al código abierto. Es más, incluíamos una cláusula básica en cada acuerdo que exigía liberar una parte del código.

Al utilizar nuestro programa, los usuarios nos dan feedback, envían informes de errores y solicitan nuevas funciones. En Penpot, la manera de dinamizar la comunidad es respondiendo a estas solicitudes y creando funcionalidades. En cuanto lanzamos una nueva feature, la comunidad se mueve porque la novedad le va a ser muy útil (¡o por simple curiosidad!).

Por su parte, puede hacer las aportaciones a través de GitHub donde alojamos nuestro código. Se trata de un repositorio online donde contribuir con propuestas digitales y donde cualquier usuario además puede crear una instancia propia de Penpot.

Y a la comunidad, ¿qué le mueve a contribuir?

Conocemos los beneficios de contar con comunidades de profesionales dispuestas a aportar sus conocimientos a proyectos de código abierto. Pero, ¿qué se llevan a cambio? Las aportaciones pueden estar motivadas por diferentes razones:

• Mejorar sus habilidades y estimular la innovación. Los proyectos de código abierto permiten poner en práctica diferentes destrezas: codificación, diseño interfaces de usuario, diseño gráfico, traducción, etc.
  Coincidir con personas con similares intereses.
• Aprender y enseñar. Al trabajar en un proyecto tecnológico de estas características, compartes conocimiento y experiencias. Unas veces como mentor y otras como mentorizado.
• Construir una reputación. Todo lo que se crea en código abierto es público, por lo que el contribuidor podrá tener ejemplos reales para demostrar lo que sabe hacer.
• Convertirse en agente de cambio. Las contribuciones pueden ser de mayor o menor envergadura. Pero sea cual sea el esfuerzo que tengan que hacer, el código abierto ayuda a las personas a sentir que están formando parte del cambio.

Con frecuencia, las plataformas facilitan guías para los contribuidores, como la nuestra de Penpot, donde incluimos -casi- todo lo que necesitas saber para colaborar con el proyecto.

Guía de contribución de Penpot

Tenemos mucho ganado en el mundo del software ya que, hasta hace pocos años, no se confiaba tanto como ahora en la capacidad de las comunidades de desarrolladores para construir tecnologías de alta calidad, inclusivas y abiertas, y esto supone una transformación tanto tecnológica como social muy positiva. Lo debemos aprovechar y apoyar.